Un sentimiento,
caricias en viento a distancia.
El dulce cantar de un piano,
amor expresado a acordes menores, bajo:
graves contrastes,
andantes allegros que no me explican el por qué.
Mi vida en estado de coma,
mi 'super-yo'abyecto.
El cielo cicatrizado,
mi compás quebrantado.
La angustia cerca de la cama,
lágrimas que se resbalan
cuerpos que se reclaman,
Placer a gran escala...
Pero no se trata de carne,
sino de existir.
No se trata de vivir,
sino de sentir.
Sería ideal declararme culpable ante sus labios,
pues por ellos quiero ser juzgados,
pero preferiría tener licencia;
licencia para expresar,
el deseo de ser yo,
su mirar.
Es este el desorden que mi cabeza ordenó.
Todos son factores extraños que extraña
mi 'yo soy'.
-Salvador Flores-
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